Aunque todos venimos a cumplir distintas misiones en nuestra vida como seres humanos, los trabajadores de la luz tienden a sentir esta necesita con mucha más intensidad que otras personas. Esto es por que en alguna parte de su ser, les queda claro que vienen a trabajar en favor del universo. Pero lo que muchos no se dan cuenta, es que cuando no lo hacen o sienten que no lo hacen emocionalmente se caen y de ahí puede venir mucho sufrimiento.
Por si fuera poco, estas necesidades no son algo tan evidentes, pues no necesariamente tienen un origen físico o mental, sino más bien tienen un origen espiritual. Por eso muchas veces no entienden lo que necesitan hacer para sanar y sentirse felices y alegres, e incluso dudan de lo que saben que vienen a hacer.
La realidad es que las necesidades espirituales de los trabajadores de la luz están bien impresas en su ser. La depresión, la amargura, las enfermedades, la ira, son señales de que este se ha alejado de su misión, o incluso la ha olvidado. Pasa exactamente lo mismo con un flor que deja de recibir sol y agua, se empieza a marchitar.
Las necesidades espirituales de los trabajadores de la luz varían ampliamente, pues pueden ir desde tener una pareja romántica, ser padres, defender a los animales o la ecología, escribir libros, dar platicas, o simplemente transmitir felicidad, cada trabajador de la luz tiene una misión especial la cual le llena el corazón de alegría.
Son muchos los que no han dado por verdaderas sus necesidades espirituales, incluso las han minimizado y hoy la tristeza y su brillo divino están guardados detrás de estas necesidades no satisfechas.
Muy por el contrario es lo que sucede con el trabajador de la luz cuando empieza a ser consiente de sus necesidades espirituales, las cuales no tienen que ser ni grandes ni pequeñas, son simplemente las que llenan de alegría el corazón del trabajador de la luz. Es hacer lo que su alma le dicta y le hace dormir con una sonrisa en la noche.
En definitiva la misión más importante y que cambia a este mundo es ser feliz, pero en los trabajadores de la luz la forma en la que logran este objetivo es importante. En el momento en el que alinean su vida para cumplir sus necesidades espirituales, su vida y el mundo se transforman para bien.
El trabajador es alguien que cambia este mundo a través de la trascendencia de sus actos para mostrar un camino de amor y felicidad.
Namasté.